Beautystore Chile es una tienda que vende cosméticos coreanos de uso profesional para manicure y cuidado facial, la cual está consolidada hace cinco años en el mercado. Su tienda física se encuentra en Providencia, pero la mayoría de sus ventas son realizadas a través de su sitio web. Heidi López es fundadora de la marca y previo a Beautystore Chile, trabajó diez años en una farmacia con atención a público y asesorías en dermocosmética, en la que pudo darse cuenta de la necesidad de las clientas en el cuidado facial y personal. Estos productos eran difíciles de encontrar en Chile, y cada vez adquirían más popularidad en el país, por lo que Heidi aprovechó sus conocimientos y experiencia como química farmacéutica para traer ítems de buena calidad, funcionales y a un precio justo, al poder identificar correctamente qué ingredientes funcionaban mejor.
Importar directamente los productos de Corea y Estados Unidos le permitió comprarlos a un menor precio, y encontrar una mayor variedad de cosméticos, con la inmediatez de traerlos cuando se encontraban en tendencia de consumo, sin tener que esperar meses para tenerlos en Chile. La industria de la belleza es muy dinámica, tener el producto en el peak de tendencia, es la clave para poder posicionarse en la mente del consumidor y como mejor tienda de cosméticos en Chile.
Su primera importación fue con la ayuda de KLog.co, y fueron USD 5000 dólares en un pallet. Desde el inicio de su marca hasta hoy en día, Heidi dice: “KLog me ha brindado la mejor experiencia en mi proceso de importaciones. Me ha enseñado todo lo necesario sobre logística internacional, ya que no sabía ni un término antes de comenzar. No he tenido la necesidad de buscar otro Freight Forwarder”. Comenzó primero con pequeños volúmenes de carga, y luego, al darse cuenta de que el negocio podía prosperar, empezó a importar volúmenes cada vez mayores de mercadería, pasando de comprar un solo pallet, a importar actualmente 40 mensuales.
Si bien muchas empresas quebraron por la pandemia, tuvieron desabastecimiento o decidieron cerrar sus puertas, Heidi hizo todo lo contrario. Apostó por tener un mayor stock de productos. Cuando más cantidad de cosméticos importó fue en este periodo de tiempo, a pesar de tener que comprar más caro. Al haber mayor demanda por sus productos, ya que muchos negocios estaban con quiebre de stock, pudo vender todo y aumentar en tres veces sus ventas disminuyendo en un 30% los precios a sus clientes, gracias a negociaciones de precios por volumen con sus proveedores internacionales. Esto funcionó en gran parte, según Heidi, porque ya tenía consolidado su mercado por e-commerce al comienzo de la pandemia, el cual surgió a raíz de ver que los productos triunfaban en Amazon, el mayor proveedor de cosméticos en el mundo. Algo que ella también deseaba en su mercado local. Sus proyecciones a futuro, están orientadas a abrir un centro de asesoría y distribución mayorista en Estados Unidos para pymes en Chile, y dedicarse a tiempo completo a su sitio web y a las ventas online, al ser su principal canal de distribución.